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MANTÉN TU RELACIÓN CON DIOS

Tras la decisión de seguir a Jesús que has tomado a través del apartado “RECONCÍLIATE CON DIOS”, es importante que tengas en cuenta los siguientes pilares que van a permitirte tener una relación con Dios sólida y en constante crecimiento.

1. ORACIÓN: Cada día habla con Dios por medio de la oración.

  • Pídele a Dios que te muestre cada día lo que no va bien en tu vida, confiesa todo lo malo ante Dios por medio del arrepentimiento de pecado, y deja que sea Dios quien te vaya cambiando cada día más a Su imagen.
  • Dale las gracias siempre a Dios por lo que Él es y por Su gran amor y misericordia hacia ti. Adóralo por medio de tu devoción sincera a Él, así como por medio de alabanzas cristianas, etc.
  • Preséntale tus peticiones y preocupaciones. Dile que te muestre respecto de cada situación qué hacer y obedécele. Preséntale también en oración a tu familia, tus amigos y todas aquellas personas que sientas de orar por ellas, de forma que no te enfoques sólo en lo que Dios va a hacer en ti, sino también en lo que Él quiere hacer a través de ti.
  • Se sensible a Su voz y a lo que te quiere enseñar y mostrar por medio de Su Espíritu Santo, que es Aquel que viene a vivir dentro de ti tras haber aceptado a Jesús como tu Señor y Salvador, y que te da fuerzas en medio de la debilidad, dirección en todos tus caminos, consuelo en momentos difíciles y una hermosa paz que invade todo tu ser. ¡Conoce a Dios cada día más a través del Espíritu Santo, que es esa Persona Divina que Jesús prometió enviarnos para que estuviera con nosotros todos los días de nuestra vida!

2. LEE LA BIBLIA Y CONOCE MÁS DE DIOS.

  • La Biblia no es cualquier libro. Sus 66 libros fueron escritos en distintos momentos de la historia de la humanidad a través de la Revelación directa de Dios a quienes escribían, siendo el manual de instrucciones que Dios nos dejó para vencer junto a Él en esta vida llena de tantas adversidades y distracciones que tratan de alejarnos de Dios y de Sus preceptos.
  • Las Sagradas Escrituras te llenarán de fe en Dios, por causa de que la fe viene por el oír la Palabra de Dios. Además, te mantendrán vivo y conectado con Dios cada día más y más, te ayudarán a crecer o madurar en tu vida cristiana y te guiarán al cumplimiento perfecto del hermoso Plan o propósito de Dios para tu vida.
  • Puedes comenzar con los Evangelios de San Mateo, San Marcos, San Lucas y San Juan, que te permitirán conocer mejor lo que Jesucristo hizo por ti, así como leer también el libro de Hechos de los Apóstoles, y sin perjuicio de que poco a poco vayas leyendo los demás libros de la Biblia, también de enorme edificación para tu vida.
  • No leas tratando de entender con tu mente o intelecto, sino que antes de leer pídele al Espíritu de Dios que te revele por medio de la lectura las profundidades de Su Palabra y que te haga comprender plenamente aquello que quiere enseñarte, de forma que puedas a posteriori ponerlo en práctica en tu vida.

3. BUSCA UNA IGLESIA CRISTIANA EVANGÉLICA DONDE CONGREGARTE

  • No sólo es un mandato Bíblico, “no dejéis de congregaros, como algunos tienen por costumbre” (Hebreos 10:25), sino que es en esa reunión de dos o tres seguidores de Jesucristo en un mismo sentir y acuerdo (véase Mateo 18:20), donde Dios envía determinadas bendiciones espirituales específicas para Su Iglesia.
  • También necesitamos establecer relaciones con otros creyentes, de forma que podamos rodearnos de esas personas que están viviendo esta misma y hermosa relación y devoción por Dios, de forma que podamos fortalecernos mutuamente a través de la oración y apoyo mutuo.
  • Si necesitas ayuda o recomendación de alguna Iglesia de la zona en la que vivas, independientemente del país que sea, no dudes en escribirnos.

4. TESTIFICA DE TU FE CON TUS AMIGOS, FAMILIARES, ETC.

  • Así como te hablaron de Jesucristo, el Salvador de nuestras vidas, es muy importante que puedas hablarles a tus amigos, familiares, vecinos, etc., de este hermoso cambio que ha sucedido en tu vida al poner tu fe en Dios por medio de Jesús, para que también puedan conocer que hay esperanza en Él y que todavía pueden reconciliarse con Dios.
  • De hecho, “¿Cómo lo van a invocar, si no han creído en él? ¿Y cómo van a creer, si no han oído hablar de él? ¿Y cómo van a oír, si nadie les anuncia el mensaje?” (Romanos 10:14). ¡No te avergüences de aquello que te ha salvado, y comparte con la ayuda de Dios y sin temor esa incomparable noticia de salvación por medio de Jesucristo!
  • Si necesitas a alguien que se ponga de acuerdo contigo en oración por una persona o situación, escríbenos y estaremos junto a ti.
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